domingo, 29 de abril de 2012

Sueños.

"... Y así después de esperar tanto, un día como cualquier otro decidí triunfar. Decidí no esperar a las oportunidades sino yo misma buscarlasdecidí ver cada problema como la oportunidad de encontrar una solucióndecidí ver cada desierto como la oportunidad de encontrar un oasisdecidí ver cada noche como un misterio a resolverdecidí ver cada día como una nueva oportunidad de ser feliz. 


Aquel día descubrí que mi único rival no eran más que mis propias debilidades, y que en éstas, está la única y mejor forma de superarnosAquel día dejé de temer a perder y empecé a temer a no ganardescubrí que no era yo la mejor y que quizás nunca lo fui. Me dejó de importar quién ganara o perdiera; ahora me importa simplemente saberme mejor que ayer. 


Aprendí que lo difícil no es llegar a la cima, sino jamás dejar de subir. Aprendí que el mejor triunfo que puedo tener, es tener el derecho de llamar a alguien «Amigo». 

Descubrí que el amor es más que un simple estado de enamoramiento, «el amor es una filosofía de vida». Aquel día dejé de ser un reflejo de mis escasos triunfos pasados y empecé a ser mi propia tenue luz de este presente; aprendí que de nada sirve ser luz si no vas a iluminar el camino de los demás. 

Aquel día decidí cambiar tantas cosas... Aquel día aprendí que los sueños son solamente para hacerse realidad. Desde aquel día ya no duermo para descansar... ahora simplemente duermo para soñar."


Walt Disney



martes, 24 de abril de 2012

Intimidad.


Intimidad es una palabra que significa, aquí están mi corazón y mi alma, pícalos hasta hacer una hamburguesa y disfrútalos, es algo deseado y temido, es difícil vivir con ella, e imposible vivir sin ella. La intimidad también esta ligada a tres cosas en la vida, los parientes, el amor y los compañeros del piso. Hay cosas de las que no puedes escapar y otras que no quieres saber.
Ojalá hubiera un reglamento para la intimidad, una guía donde se explique cuando se traspasan los limites, estaría bien saber cuando lo haces, aunque no se si podrías lograrlo, intimas cuando te lo permiten, y sigues mientras te dejan, en cuanto a las normas quizá no haya ninguna, quizá sea uno mismo quien tenga que definirlas.

Todo se reduce a muros.


El que debo saltar para acabar mis prácticas, el que debo sortear para poder entrar en un quirófano y luego está el más importante, el que te separa de la gente con la que trabajas. No ayuda coger confianza, ni hacer amigos, debes levantar un muro que te separe del resto del mundo, cierta gente es demasiado peligrosa, todo se reduce a unos muros que levantas con arena rogando que nadie los salte.
En algún momento hay que decidirse, los muros no mantienen a los demás fuera, si no a ti dentro. La vida es un caos, somos así. Puedes pasarte la vida levantando muros, o puedes vivirla saltándolos. Aunque hay algunos muros demasiado peligrosos para cruzarlos. Lo único que se, es que si finalmente te aventuras a cruzar, las vistas al otro lado son fantásticas.

sábado, 21 de abril de 2012

Lo más extraño es que a veces no nos damos cuenta de hasta qué punto nos quieren las personas que nos rodean.


Don't cry.


The Vow.


Todos los días de mi vida.


Come on.


Oh, yeah.


Creces, experimentas, aprendes...

...crees saber cómo funcionan las cosas, estás convencido de haber en­contrado la clave que te permitirá entender y enfrentarte a todo. Pero después, cuando menos te lo esperas, cuando el equilibrio parece per­fecto, cuando crees haber dado todas las respuestas o, al menos, la mayor parte de ellas, surge una nueva adivinanza. Y no sabes qué res­ponder. Te pilla por sorpresa.

Decisiones.

Porque a veces las decisiones, poco importa que sean graves o pequeñas, se toman por las razones más variopintas y nadie sabe verdaderamente cuál ha sido el instante, la sensación, la molestia o la conmoción que nos ha empu­jado a hacerlo. Y, sin embargo, ocurre.

Vete despacito que las prisas no son buenas.


¿Y luego qué pasó?

Luego nada.

miércoles, 11 de abril de 2012

El cuerpo humano está diseñado para compensar las pérdidas.

Lo hace, por lo que no necesita las cosas que no puede tener. Pero a veces la pérdida es tan grande que el cuerpo no puede compensarse por sí mismo. Ahí es cuando los cirujanos intervienen.
Somos muy optimistas al comienzo de las cosas. Parece que solo hay un mundo que ganar, sin pérdidas. Dicen que la incapacidad de aceptar las pérdidas es por la locura. Probablemente es verdad, pero a veces es la única forma de estar vivos.

Qué pasa con los hombres.


Hay diferencias distintivas entre el cerebro del hombre y la mujer: el cerebro de la mujer tiene un hipocampo mayor, lo cual normalmente las hace mejores en retención y memoria. El cerebro de los hombres tiene un cortex parietal más grande, lo que ayuda cuando tienen que defenderse de un ataque. Los cerebros de hombres y mujeres enfrentan los desafíos de maneras diferentes. Las mujeres están programadas para comunicarse con el lenguaje: detalles, empatía. Los hombres… no mucho. No significa que sean menos capaces de emociones. Podemos hablar de nuestros sentimientos, es solo que… la mayoría de las veces preferimos no hacerlo.
Sé un hombre. La gente lo dice todo el tiempo ¿Pero qué significa eso? ¿Se trata de fuerza? ¿Se trata de sacrificio? ¿Se trata de ganar? Quizás es más simple que eso. Tienes que saber cuando no ser un hombre. A veces hace falta un hombre de verdad para dejar de lado su ego, admitir la derrota, y simplemente empezar de nuevo.

Trabajas, estudias, te preparas.

Meses y años que te llevarán a un día: el día en que das un paso adelante. El día en que das un paso atrás.
A veces sucede en un instante. Damos un paso hacia adelante, nos convertimos en un líder, vemos un camino a seguir. Vemos un camino y lo tomamos, incluso cuando no tenemos idea de a  dónde vamos.

Madre.


Cuando mi madre dejó a mi padre, no le dijo que se iba y que me llevaba con ella, hasta que aterrizamos al otro lado del país. En aquel entonces se llamaban problemas familiares. Hoy en día se llamaría secuestro.
Crees que el amor verdadero es el único que puede destrozarte el corazón, el que puede quitarte la vida y dártela, o destrozártela. Entonces… te conviertes en madre.

Incluso los buenos matrimonios fallan.

En un minuto estás sobre suelo seguro, y al siguiente ya no lo estás. Y siempre hay dos versiones: la tuya y la suya. Aunque las dos versiones siempre empiezan de la misma manera. Ambas empiezan con dos personas enamorándose. Nadie se casa pensando que va a fracasar, piensas que el tuyo es el que va a conseguirlo.  Por lo que siempre llega como una conmoción, el momento en el que te das cuenta que se ha acabado. En un minuto estás de pie en tierra firme, y al siguiente ya no.


¿Tienes lo que hace falta?  Si tu matrimonio está en problemas ¿puede sobrellevar la tormenta? Cuando el suelo te traicione y tu mundo se colapse, puede que solo necesites tener fe y confiar en que puede superarlo juntos. Puede que solo necesites aferrarte fuerte. Y no importa nada, no te rindas.