lunes, 19 de agosto de 2013

Mathias Malzieu, La mecánica del corazón.

“Primero: No toques las agujas de tu corazón. Segundo: Domina tu cólera. Tercero y más importante: No te enamores jamás de los jamases. 
Si no cumples estas normas, la gran aguja del reloj de tu corazón traspasará tu piel, tus huesos se fracturarán y la mecánica del corazón se estropeará de nuevo.

Elizabethtown

- En fin, por lo menos lo hemos hablado pero, es lo que dicen.
- Es lo que dicen, ¿no?
- ¡Sí! Es lo que dicen.
- Siempre me ha intrigado una cosa, ¿quiénes lo dicen?
- Ya sabes, ellos.
- ¿Ellos?
- Ese inevitable colectivo, ellos.
- ¡Y quién dice que tenemos que hacerles caso!
- ¡Ellos mismos!

sábado, 10 de agosto de 2013

Cuando hay un problema lo vemos todo negro.

Los problemas no vienen solos, siempre hay una solución. La solución siempre está en medio de los problemas. Hay problemas por todos los lados. Hay problemas que no nos dejan ver la solución. ¡Pero siempre está ahí! Cambiemos las cosas. Cada problema tiene muchas soluciones y se consigue con trabajo, pasión, ilusión, esfuerzo y siendo feliz.

El futuro

He leído una noticia que dice que el futuro es negro, que no hay futuro... Un momento, el futuro dependerá de nosotros, de lo que hagamos ahora... Entonces no entiendo por qué ya se sabe que el futuro será negro...
¿Qué es el futuro? Lo que va a pasar. ¿Y cómo es? ¿Negro? Pues yo lo veo blanco. Si el futuro no ha pasado, ¿por qué decís que es negro? En nuestra mano está el cambiarlo. ¿A qué esperáis? Pronto creceré y el futuro será del color que yo quiera.

miércoles, 7 de agosto de 2013

Hoy, estoy convencida de que nadie pierde a nadie, porque nadie posee a nadie.



"Hubiéramos podido cruzarnos por ahí sin vernos, mirando hacia otro lado, distraídos… O haber pasado a diferentes horas por el mismo lugar, o no haber pasado nunca… Tuvo que haber un “algo”, un mandato divino, una muy bien estudiada casualidad, para que, entre los cientos de millones de habitantes del mundo, tú y yo coincidiéramos en el mismo lugar al mismo tiempo."
-Andrés Eduardo-

Necesito.

Necesito verte, necesito que me sonrías, necesito que me abraces, necesito que me beses, necesito que estés ahí, necesito que me necesites.

-La Búsqueda: El niño que se enfrentó a los nazis” de Blanca Miosi-

"No es verdad que el ser humano pueda hacer borrón y cuenta nueva, siempre queda algo, nuestro cerebro siempre guarda algún rastro de lo que uno quiso borrar."

Mario Benedetti.

"Todos queremos lo que no se puede, somos fanáticos de lo prohibido".

Y te escribo porque siento que estás ahí, detrás de todas estas letras.


Hace unos cientos de años, Benjamin Franklin compartió con el mundo el secreto de su éxito: ” Nunca dejes para mañana,” dijo, “lo que puedes hacer hoy.” Este es el hombre que descubrió la electricidad. Uno pensaría que la mayoría de nosotros escucharía su consejo. No sé por qué uno pospone las cosas, pero si tuviera que adivinar, diría que tiene mucho que ver con el miedo. Miedo al fracaso, miedo al dolor, miedo al rechazo. A veces, es sólo miedo de tomar una decisión. Porque, ¿qué pasa si te equivocas? ¿Qué pasa si estás cometiendo un error que no puedes deshacer?
Todos hemos escuchado proverbios, oído a los filósofos, escuchado a nuestros abuelos advirtiéndonos sobre el tiempo desperdiciado, oído a los malditos poetas instándonos a aprovechar el día. Sin embargo, a veces, tenemos que verlo por nosotros mismos. Tenemos que cometer nuestros propios errores. Tenemos que aprender nuestras propias lecciones. Tenemos que barrer la posibilidad del hoy debajo de la alfombra del mañana hasta que no podamos más. Hasta que no entendamos por nosotros mismos lo que Benjamin Franklin en realidad quería decir. Que el saber es mejor que el preguntarse, que el despertarse es mejor que el dormirse, e incluso que el mayor fracaso, aún el peor, es mucho mejor que el no haberlo intentado.

Todo es posible, si lo crees.