jueves, 18 de abril de 2013

Y poco a poco fue abriéndose a los demás, dejó que sus heridas cicatrizaran, que el olvido impregnara sus recuerdos de un nuevo aroma de optimismo y alegría y fue ahí cuando comprendió que un recuerdo es doloroso cuando queremos recordarlo como tal y que las cosas tienen la importancia que tú les quieras dar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario